martes, 15 de octubre de 2013

No quiero seguir saliendo contigo

¡Hola!

¿Cómo estás? Bien. Te miré a los ojos y te lo dije. Nunca algo tan fácil me había parecido tan difícil. Nunca se me había hecho fácil algo tan difícil. Sí, soy una contradicción con patas. Nina, un placer, mucho gusto. 

Y vi que no te importaba, que te daba lo mismo y que para ti, estar o no estar era la misma vaina. Yo no puedo vivir así. No quiero vivir así. Quiero estar con un carajo que se muera por mí y yo quiero morirme por él. Quien sea que él sea, claramente no lo conozco todavía. Habrá alguna indigna que diga que he debido esperar un pelo y darle más tiempo, pero yo estoy en desacuerdo. Yo siento que you were just not that into me y la verdad es que me ladilló esperarte. Tenemos velocidades diferentes y me dio flojerita esperar que te pusieras las pilas. 

Esto no es nada más que una medida hiperegoísta de mi parte. Es mejor retirarme ahora, que todavía puedo irme sin dolor. Irme ahorita que no te quiero ni te necesito. Irme, antes de enamorarme. La mujer que soy es muy valiente para algunas cosas, pero sabe cuándo tomar el riesgo y cuál riesgo es el que va a valer la pena. Es una cosa de intuición, cosa que los hombres no tienen y por eso no entenderías. Claro, una no toma riesgos porque los demás lo hagan pero tampoco sería muy inteligente de mi parte lanzarme en benji con una cabuya artesanal, ¿no?

Hay una cosa buena de todo esto y es que tuve las bolas de decírtelo. O sea, cuando no quiero salir más con un tipo por la razón que sea (sin que haya ocurrido un dealbreaker demasiado descarado que tenga que decírselo en su cara) lo que hago es hacerme la huevona. Me desaparezco sutilmente, dejo de atender el teléfono, dejo de desear buenas noches y dejo de mandar besos por Whatsapp... I am just fucking proud de haber podido decirte como que mira, ya. Y decirlo bien. Decir que enough, that That was not working for me and that you were not working for me. No me estabas sirviendo porque no me estás trabajando. Where is the motherfucking romance? 

You just don´t want it bad enough, eso es lo que pasa. No hay nada más cuchi que un hombre que de verdad está interesado y que quiere enamorarse de la jeva. Se rasga las vestiduras y se pone cursi y hace grand gestures y busca y opina y quiere y trabaja activamente por la cosa. En tu caso, fue como todo muy "meh, ya estamos aquí". Si eso es ahorita, imagínate tú después de tres meses juntos (porque tres meses es un gran record para mí, que no entiendes. Las relaciones más largas de tres meses que he tenido eran con tipos que nunca valieron la pena).

Es verdad, a veces soy impaciente e intolerante, pero siento que esta vez no. Esta vez se trata de no querer esperar que a ti te dé la gana de lanzarte conmigo, porque tengo espejo en mi casa y sé que cualquier huevón debería darse con una piedra en los dientes si yo le atiendo el teléfono. Digamos que eres demasiada bomba para tan poco chicle y andabas como demasiado sobrado que si "aaaah esta jeva es chévere yo me voy a quedar aquí rondando hasta que me dé la gana de ponerme unos cojones y reciprocar así sea un pelo, pero bueno por ahora me quedo aquí confiado y listo" y a mí me ladilla eso.

Además, peleamos una vez grave en dos semanas y tu fuiste un patán la otra, entonces ¿para qué? No es un buen augurio, hemos debido dejar esa vaina hasta ahí la otra vez. Pero bueeee...

También pasa que es que yo he tenido demasiadas relaciones de mierda. Yo estaba dando todo lo que tu querías y tú no me estabas dando ni siquiera lo que yo necesitaba. AGAIN. Que fuerte darme cuenta de que I just keep falling for the same guy and being in the same exact relationship over and over and over and over. Siempre doy yo y nunca recibo, que huevo.

Fue la vaina más madura que he hecho en mi vida, creo. Tú decías que el espacio es burda de importante. Pero si el espacio lo que hace es que una esté en una relación mediocre, pues mira, no. Ahí tienes todo el espacio del mundo. Toma tu puto espacio. Tanto espacio que mira, ya ni me ves. Ni me verás. 

8 comentarios:

  1. A veces en la vida hay que lanzarse de esa forma como describes, en benji con cabuya artesanal, es más, posiblemente aún sin cuerda. Solo para ver si puedes volar, en todo caso, para aprender a volar.

    ResponderEliminar
  2. Estas conciente de que cuando encuentres lo que aqui dices que quieres no le vas a parar ni media bola?

    ResponderEliminar
  3. Estas conciente de que cuando encuentres lo que aqui dices que quieres no le vas a parar ni media bola?

    ResponderEliminar
  4. http://vidadeescritoresvenezolanos.tumblr.com/post/63916374799/cuando-leo-el-blog-de-nina-rancel

    ResponderEliminar
  5. Buenas noches Nina.

    Vengo leyéndote hace algunos meses, es un interesante blog, explosivo, rápido, lleno de pequeñas ideas que a veces tocar releer para poder sentir toda su esencia y me gusta.

    Interesante blog.

    Ahora, en esta entrada, la historia me dice que te aburres de un tipo porque es dormido, el maldito va sobrado creyendo algo como "ya la tengo comiendo de mi mano". Craso error, bien por ti, una buena decisión.

    Ahora, algo que no me gusta, es esa parte donde si no te interesa un tipo, le vas dando largas o eludiéndolo sutilmente hasta que se aburre.

    Personalmente prefiero que una mujer en esa situación me diga algo como: "Nada, usted y yo nada, no vamos para ningún lado; yo no siento nada de nada por usted; mejor dejemos esto hasta aquí y todos tranquilos."

    Es mejor curdo pero directo.

    Seguiré leyendo.

    ResponderEliminar
  6. Eso de "evitar " dolores antes de que lleguen no me convence del todo, pero el cuerpo antes el coñazo, naturalmente retrocede, y bueno,vale, eso...Tus post me dejan triste ¿Qué es esto, Ninaa?

    ResponderEliminar
  7. me encantó!! como siempre, me siento identificada, no dejas de impresionar!

    ResponderEliminar