Nuestro Insólito Universo y los Tarados que lo Habitan.

Mi carro. Escribiendo un mensajito.
-Hola. Qué vas a hacer?
- Ni idea. Tú?
-Ni idea. Quieres que nos consigamos?
-Dale, nos vemos en Tal Parte.
-Plomo.

Tal Parte.
-Hola. Quieres un ron?
-Sí. Por favor.
-Dos tragos de Valentía en un Vaso, coming right up.
-Gracias.

Tal Parte. 7 vasos de valentía después.
-Vámonos. Tú y yo. Ya.
-¿A dónde Uva?
-No sé, pero quiero irme de aquí.
-Vámonos. Pero te invito a comer primero.
-Oki doki.

X Arepera.
(en medio de una conversación animada)
-Necesito un favor...
- ¿Cuál será?
- Necesito darme los besos con alguien. Y ya que estamos jugando a esta mariquera, pues vamos a zampar.
- ¿Conmigo o con cualquiera?
- Con cualquiera de hecho. Pero si te sirve de algo estás de primero en la lista.
- Dale, terminamos de comer y nos vamos a mi casa/calle/carro/cualquier vaina.
-Dale. Gracias totales.

X Arepera, un poco más tarde.
-Tenemos un problema.
- Tendrás un problema tú. Yo estoy fino. Jajaja. (Esperando la risa de él. Silencio incómodo)
-Me da un poco de cosa con mi hermano. Sabes que yo vivo con él... no creo que sea buena idea ir para mi casa y como se acaba de mudar, pues no hemos discutido esas cosas de niñas durmiendo en la casa.
- Tu hermano, por medio de quien nos conocimos es el hombre más mujeriego que conozco. Con la excepción, quizás de... pues no se me ocurre nadie. Su casa es un desfile de todo tipo de mujeres y ¡¿quién coño te dijo que yo voy a dormir contigo?! Si te refieres a "dormir," pues no, no vamos a dormir juntos. Y dormir de sólo dormir es un término muy fuerte y me estoy acostumbrando y enseñando a mi misma a dormir en el medio de la cama. Esto, si lo ves de la manera que yo lo veo, es un intercambio de negocios. Una sencilla transacción. En la que ni tú ni yo perdemos y los dos ganamos.
- Bueno pero es que me da paja pues...
-Dale. Ya entiendo la mensajeadera a esta hora. Tranquilo. Yo me voy para mi casa a dormir. Sola. En el medio de la cama. Y mañana aparecerá un hombre con cojones que quiera darse los besos conmigo. No puede ser que una mujer tenga más bolas que tú, come on!