Pues Sí, Chico. Un Año Más.

Y pensar que había gente que decía que no ibas a llegar. Con gente me refiero al médico y a todos los que nos veían rumbeando de lunes a lunes por ahí. Pero contra todos los pronósticos te fajaste y seguiste los consejos del doctor. Y aquí estás, escoñetado pero jodiendo.

Entonces, para celebrar que la gente no tenía razón decidí escribirte para felicitarte por tu cumpleaños. A nadie le dicen que las mejores amistades son las que se hacen por cosas de la vida, por circunstancias extrañas y totalmente impredecibles. A mí por lo menos nadie me lo dijo. Por eso no deja de sorprenderme que nos hayamos hecho tan panas, como dicen por ahí, ya de viejos.

No deja de sorprederme lo fiel que eres. Lo inteligente y lo carismático, también. El último año he visto de cerca y he envidiado el hecho de que todo el mundo te quiere y tú sabes querer a todo el mundo. Sabes decir las cosas en el momento y en el tono correctos. Sabes hacer sentir bien a la gente con lo que son, porque nos aceptas con nuestras cosas buenas y malas. Sabes decir lo que necesito escuchar siempre. Con otros, tuve que aprender a decir y a entender las miradas durante años. Contigo fue instantáneo. Al día dos de nuestra amistad ya sabíamos hacer cambio de luces y entender perfectamente lo que nos estábamos diciendo. Me enseñaste a hacer radio y a ser más tolerante. A apreciar las cosas por lo que son y no por lo que quiero que sean. Me enseñaste que sí hay gente en la que se puede confiar plenamente. Que hay gente allá afuera que no revela los secretos de los demás.

También me enseñaste que los shots se toman mejor si se toman bien acompañados. Y que no tiene nada de malo tomar birras (o mojitos o tequilas o whisky) un lunes. Aprendí que hay gente a la que puedes querer más de lo que alguna vez soñaste, aunque los hayas amenazado un día con mandarle a unos malandros si jodía a tu amiga. Aprendí que siempre puedes hacer más hermanos y más amigos. Me enseñaste que it´s ok to be crazy. También sé, gracias a ti, que al que no le guste lo que hay pues que se vaya a buscarlo a otro sitio.

Gracias por ser como eres. Por amarnos a las cuatro "por lo que es cada una." Por ser mi fan A número 1 y permitirme ser la tuya. Por soportarme y calarte mis mariqueras guayabales. Por no importarte lo que piensen los demás. Por ser una persona extraordinaria, por echar pa´lante, por reírte conmigo y preocuparte por mí. Por contarme toooodo y dejarme contarte toooodo. Por permitirme entrar a tu vida tan fácilmente y no haberme botado después de todo. Hay que verle la cara a eso. Gracias por entenderme y dejarme ser. Gracias por ser tan incondicionalmente fiel. Por saber echar vaina como nadie. Por ser serio cuando te toca (gracias a Dios, no es tan seguido eso). Gracias por que sé que vas a estar ahí en las buenas, las malas, las verdes, las maduras. Con caña o con nestea. Gracias porque cuando me case rascada en Las Vegas no te vas a arrechar porque no te dije, sino porque no te guardé caña. Porque si no me caso rascada en Las Vegas te vestirías de pingüino para caminar en mi cortejo. Por dejarme malinfluenciarte y malinfluenciarme todos los fines de semana. Por celebrar mis pseudo-accomplishes como si fueran tuyos. Por las fiestas pandemoníacas y la muerte de mi hígado. Por mis pulmones vueltos mierda. Por nuestras escapadas. Por ser el mejor partner de matrimonio y por tener una novia del carajo que sabe que te amo como a un hermano. Porque that´s what you are.

Esto se acabó, porque no quiero que llores en frente de todo el mundo. Feliz cumple Paul. Gracias por todo. Te aman y te adoran,

Andreína, Uva, Nina y La Rancel.

PD: quería dárselo en persona pero por culpa de mis costillas no voy a ver la luz de la calle anytime soon.