52 - Poco a poco pasando los 9 posts que me faltan.

Esto no estaba en mis planes. Y traté de negarme. De usarlo como tantos hombres han querido usarme a mí. Pero no pude evitarlo. Está en mi naturaleza vivir las cosas plenamente, disfrutar los detalles, los momentos, los mensajes, las comidas y los tragos. Si uno es lo que hace, y yo lo que hago es actuar, pues haberme cruzado con este pana es una manera más de hacer lo que hago. Vivo las cosas como vienen todos los días. Para mejorar como actriz, decidí no negarme a los procesos y ver. Ver y dejarme afectar por lo que vi todos los días.

Mi plan era salir dos días sí, tres días no. Hacer TRX, meterme a hippie y apagar el celular todo el domingo. Fajarme con el Krav Maga, ver películas e ir al cine sola. Buscarme y conseguirme. Salir burda con mis amigas e ir on the prowl for the next Dealbreaker. El plan era echarme en la terraza a leer los domingos o tomar sol en las mañanas. El plan era sacar a pasear a Zidane. Tenía demasiado tiempo libre que iba a aprovechar.

Yo iba a aprovechar las mañanas para ir al club. Iba a terminar el francés, leer más de lo normal. Iba a aprovechar estas vacaciones para mejorar, crearme el hábito de despertarme más temprano. Iba a joder todos los días con mis panas, me iba a reventar a curda y andar de bar en bar conociendo tipos nuevos. Algunos interesantes; otros, me imagino, dignos ejemplares de su raza.

El plan era tomar bastante, pero de viernes a domingo. De lunes a jueves iba a portarme bien, porque la edad pega y los ratones son cero proporcionales. El plan era salir y divertirme sola. Ahora salgo y me divierto acompañada, porque nadie quiso escuchar cuáles eran mis planes.

Es una verdad irrefutable de la vida: tú planeas y ella se ríe de ti. Tú trazas una meta y ella te lleva hacia el lado opuesto. Tú intentas ejecutar una acción A y ella, a veces hasta por las malas, te hace saber que quiere F. ¿Quién es uno para negarse a los designios del destino? Especialmente cuando la estás pasando bien.