53 Confesión # 68

Me gusta mi trabajo. Me gusta lo que hago y con quién lo estoy haciendo. Todos los días le doy gracias a la Virgen por haberme dejado caer aquí, por vainas de la vida.

Me gusta mentarle la madre a blogger porque las plantillas nuevas son una desgracia.

Me gusta como se oye mi voz con audífonos, pero cuando los compré la odiaba porque los audífonos son burda de buenos y se escucha todo tal cual es.

Me gusta saber que dejé que las cosas me sucedieran.

Me gusta el ruido que hace el agua al salir disparada cuando los cauchos pasan por un charquito. (ppssshhhhh)

Me gusta la palabra onomatopeya, pero soy malísima creando alguna. Ver punto anterior.

Me gustan las palabras por diversas razones. Puede ser por como suenan, por como se escriben o por lo que significan.

Me gusta el Nestea de limón y el de durazno. No voy a comentar de The Others porque es de mal gusto y estamos en una confesión positiva.

Me gusta escribir a lápiz o con Kilométrico, como estoy escribiendo ahorita.

Me gusta verle la boca. Soy una tipa rara in that way.

Me gusta caminar cuando hay sol y luz. Si Caracas tuviera mejor infraestructura pro-peatón dejaría el carro en el estacionamiento varios días a la semana.

Me gusta estar adentro del carro cuando lo lavan. Me gusta ser así de infantil.

Me gusta la madurez que he adquirido con los años. Creo que conseguí un buen balance.

Me gusta haberle puesto tanto corazón a este blog.

Me gusta saber que tomé la decisión correcta. Estoy segura de que así fue.

Me gusta entender como una mujer lo que pensaba (y por qué) como una chama.

Me gusta que él tenga tanto poder sobre mí. Aunque no me haga bien. (Son Ellos distintos, ah?)

Me gustan las carteras marrones aunque no me guste el marrón en general.

Me gusta ver zapatos en Google. I google zapatos tal color y paso horas viendo tacones en todas sus presentaciones.

Me gusta bailar reggaetón si estoy borracha. ¿Y?