Lo bueno de ser católica light es que uno puede rezarle a los santos que quiera y no es herejía. Hoy, porque hubiera sido tu cumpleaños, te voy a rezar a ti.
Todos te extrañamos. A veces, como hoy, nos duele mucho. Bueno, a mí me duele. Perdí demasiado tiempo contigo y cómo se recupera eso, nunca sabré. El mejor legado es que nos educaste bien, a todos. Entonces nos acompañamos y nos entendemos. Somos gente muy distinta, pero muy igual en lo que verdaderamente importa.
Van dos años y soy otra mujer. Creo que te hubiera gustado esta mujer. Creo que estarías orgullosa de esta mujer. Trato de no hacerle daño a nadie y cada vez digo menos groserías, sólo cuando son estrictamente necesarias o cuando se me escapan. Nada grave. Todavía falta mucho, eso sí. ¿Qué tengo que cambiar? ¿Hay algo que no esté haciendo bien? ¿Cómo hago para corregirlo? Una ayudaíta, anda!
Creo que hubieras amado #CuatroManerasDeQuererte, no te preocupes que nadie la vio, no es que te quedaste por fuera sólo tú, tranqui. O sea, nadie de la familia sino M. que se echó el viaje desde Orlando. Sé que la última que viste fue un poquito too much para una mujer de tu época y amo que hayas disimulado cuán shockeada quedaste, jajajaja. Tu mejor talento era tu diplomacia. No lo heredé. Tengo otros, gracias, bendición.
Cada vez engordo más rápido. ¿Eso es por ti? Ok... gracias por esa, te luciste, puessss. Jajajaaj.
A veces me canso. A veces lloro sin razón. O sea, me refiero a que son razones... gafas. A veces me cuesta dejar ir las cosas. A veces me frustro pero en el último año (casi un año, pues) no he estado tentada a tirar la toalla ni una vez. Resistir, aguantar, seguir luchando y ya. Qué terquedad. Esa sí es demasiado nuestra y ha sido muy útil para la profesión que escogí.
Los "problemas" son... superficiales. He estado mucho peor y mira, no me morí. No me mataron las colas de Bogotá, soy invencible, jajajaja. Casi me mata la soledad, o el frío, o lo demás, pero como que tenemos ADN de sobrevivientes.
Me pasa algo. ¿Sabes cuando sientes que algo maravilloso está por pasar pero no termina de pasar y terminas frustrándote? Bueno, así estoy. No que si frustrada acurrucada en mi cama sin moverme, pero sí ansiosa e impaciente. ¿Por qué no termina de pasar? ¿Si es que estoy arando en el mar me puedes mandar una señal o algo? No te me aparezcas porque me muero del susto, pero sí en un sueño o un mensaje con el azúcar sobre un churro o algo. Olvida lo del churro, aquí no voy a conseguir churros como los tuyos y por eso nunca los como. Ni me inmuto.
A veces como pasta con mantequilla y 100% de las veces que lo hago me acuerdo de ti. Bueno, lo hago para acordarme de ti. ¿Te acuerdas que en mi último cumple te gustó mi ceviche que hice yo solita? Cada vez que puedo, lo hago. Y me acuerdo de quién?! Ajá. Y de mi tía, que fue la que te llevó ese día. Terminamos llegando a la misma hora por la cola, subieron, vieron donde estaba viviendo, comprobaron que tampoco era un desastre horrible y me ayudaron a bajar las cosas. Sigo intentando que mi consomé sepa a tu consomé, pero sin éxito. No pierdo la esperanza, nunca. ¿Será que la esperanza culinaria la debo aplicar en lo otro? Señal inmediata, conclusión a la que llegue inesperadamente pero que voy a tomar como que la sembraste tú. Gracias, la necesitaba.
En 20 años voy a hacer unos calamares en su tinta que no juegan carrito, pero tenemos que ir un paso a la vez.
Tengo tu voz guardada pero en el disco duro que dejé en Miami. He debido pasarlo al celular para tenerla ahí siempre. No quiero que se me olvide tu voz, coño. Y no me regañes por la grosería que era justa y necesaria. Igual tengo captures de nuestros mensajes y full mensajitos de cuando el celular era tuyo, entonces los leo como si todos fueran para mí.
Me he convertido en una mujer súper tolerante. Creo que eso te encantaría. Respeto que si todo de los demás y dejé de amargarme por cosas que no son problema mío. Obvio que me dan mis ataques, tipo cuando la gente dice "cabello" o "colocar" donde no va, pero ya no les grito, ni los regaño. Trato discretamente de decir pelopelopelo en una oración y exagerar mi sifrinería para que entiendan. Puntos infinitos para mí. Inventé un término que creo que te daría mucha risa, para nombrar a la gente como yo. Sifrippie. Sifrina Y hippie. Soy una genia, pero eso ya lo sabías.
Nunca te pregunté si más nunca quisiste enamorarte. Nunca hablamos de mujer a mujer, siempre hablábamos de nieta a abuela, de abuela a nieta. Nunca supe si alguna vez quisiste volver a salir con alguien pero te dio miedo. Y ahora que me atrevo a hacer estas preguntas no estás para responderlas. Nadie te hubiera juzgado, estoy segura. Te merecías ser feliz, y obvio que sé que fuiste feliz, pero me pregunto si alguna vez te hizo falta esa parte. Cosas locas de treintona romántica y cursi. A mí sí me da miedo. No siempre, no todo el tiempo, no me obsesiono con la cosa, pero me pongo melancólica y me da por pensar en eso. ¿Alguien me va a amar a mí como mi abuelo te amó? ¿Voy a amar yo a alguien como tú a él y tener hijos? Quiero eso para mí pero no sé si está meant to be, ¿sabes? Y como bien sabes, querer algo y no obtenerlo es un teeeeema.
Ojalá hubieras conocido al baby. Estarías muy derretida. Voy a cambiar drásticamente de tema porque voy a llorar más de lo que estoy llorando, ok, besitos.
Hice una rutina de stand up inspirada en ustedes, mis dos abuelas. Es como una amalgama de abuelas, vague enough para que nadie sepa de cuál estoy hablando. Termina siendo una abuela genérica y listo. Si te ofende, mándame una señal (aclaro, una vez más, en un sueño o algo etéreo que si en como caen las pasticas en el plato o en los rastros de mantequilla pegados a la cuchara, porque te me apareces y ahí quedé). Ojo, la gente se muere de la risa y juro que es desde el respeto y desde la admiración y son cosas que en la vida real nunca te hubiera dicho. Pero ya sabes, si te parece too much, una señal y listo. Tampoco es que la haga todo el tiempo, pero cuando me acuerdo hago ese bit y es chévere.
Cada vez que voy al mar pienso en ti. Creo que escogiste un muy buen resting place. La vista es maravillosa. Uno subestima lo lindo que es el mar porque siempre lo hemos tenido muy cerca, como subestimamos el tiempo que vamos a tener aquí y que a veces no hacemos que cuente. Cuando te fuiste entendí eso y más nunca nadie me lo va a tener que recordar. La vida entera es un milagro y todo me parece una maravilla (60% del tiempo, tampoco es que ahora soy Heidi en la pradera, no exageremos).
¿Es raro decirte que a pesar de todo sé que estás? O sea, no es que te llamo por Ouija pero después de que me pasa algo heavy, viene una paz muy loca, muy rara que no sé explicar. No es que escucho voces sino que algo me calma. ¿Eso eres tú? Me gusta creer que eres tú. Me imagino que eres tú y para mí, es lo que cuenta. Es lo que vale. Saber que no me abandonas y que todo lo bueno que me ha pasado en los últimos años es porque te lo ofrezco. Debo admitir que he perdido el hábito de dedicarte las cosas. ¿Será por eso que hay noches de shows que son buenísimas y otras que son como... meh?
Lo que más me hizo llorar en toda Bogotá, y mira que hubo cosas, fue cuando me robaron la billetera. Porque tenía tu cédula de extranjera y había sido como mi estampita, porque yo también era una extranjera. Venezuela fue mejor contigo de lo que fue Colombia conmigo, eso es evidente. Fue una noche desesperante. Me imagino que me viste. Me robaron los diez piches dólares que me quedaban, pero no lloré por eso. Lloré por lo que más nunca recuperaré. Como tu cédula. La semana que viene se cumple un año de esa noche. Si no había entendido, ese fue el momento que entendí que el dinero es la cosa menos importante del mundo. Me acuerdo y me da demasiada arrechera. Fucking ladrón, vale, qué va a hacer con tu cédula venezolana, la foto de mi papá, mi pulserita de Comedy Central Fest y la medallita que me regaló mi pitá?! Otras groserías justificadas, no me regañes. Mis amuleticos no tenían precio y eso me terminó de devastar. No hay suficiente dinero en el mundo para reponer eso. Perdón, no fue mi culpa, te lo juro. Yo estaba en misa, pues. Mi memoria es tan mala, que a pesar de ver tu cédula mííííínimo una vez por semana por un año y medio, no me acuerdo del número. Heredé muchas cosas de tu hijo, esa es la única que no me gusta, la memoria de pollo.
Fueron 24 horas horribles. Y después me calmé. ¿Fuiste tú? Yo creo que fuiste tú. O en ese momento sentí que fuiste tú. Me salvó eso, porque en serio estuve muy triste. Fue el día que más triste estuve allá. Gracias por calmarme cada vez que creo que se acabó lo que se daba. Si no eres tú, no quiero saber. Yo voy a pensar que sí, siempre. Si no eres tú no me des la señal porque va a ser una minidecepción jejejeje.
Uso full cosas tuyas y eso me ayuda. Tus libros están bien cuidados, ya leídos varias veces. No escribías en los libros, por cierto. Eso no lo sabía. Siempre buscaba tu letra o una nota o una pregunta. Al menos en los que tengo, no. Fue una microdecepción porque estaba esperando tu letra chiquitica adornadita. Por cierto, nadie me los peleó, muérete. Definitivamente soy la única lectora de esa casa, jijijij. ¿En dónde fallamos, qué hicimos para merecer eso? Jajajajajaa. Tengo dos carteras que usaré hasta el día de mi muerte. Son bellas y son de noche, no pasarán de moda. Y si pasan de moda, me sabe a casabe.
Porfa, aparece en forma de grasita de consomé para que me digas que no me puedo rendir. Me ayudaría mucho. Yo sé que te fuiste porque ya no te necesitábamos, porque hiciste todo lo que humanamente pudiste por dos decenas de personas, pero... me ayudaría mucho que me dijeras que falta poco y que no ha sido en vano.
Espero que estés bien. Me imagino que estás tranquila y que sabes esto porque nos estás viendo, pero por sia: estamos bien.
Ya, eso es todo lo que quería contarte y pedirte. Te quiero y te extraño. ¡Feliz cumpleaños! Bendición.