domingo, 25 de septiembre de 2011

Una mentadera de madre casual porque es más fácil sentir arrechera que dolor

No solamente estoy triste. Estoy arrecha, por varias razones.

Una de ellas fue la pausa de mierda. ESA pausita de mierda en la que pude casi escuchar su tren de pensamiento, a punto de decirme que sí. Que sí que volviéramos, que fuéramos felices, que intentáramos, que nos quisiéramos como nos hemos querido todo este tiempo. Ese silencio en el que crees que va a ganar el amor que nos tenemos y gana el orgullo y una relación pasada que lo dejó marcado para mal.

El orgullo me tiene arrecha también. Si yo puedo meter el orgullo en una maletica temporal y pedirle un chance—sólo un chance, un chance era todo lo que yo necesitaba para hacerlo feliz de nuevo--¿por qué él no? Si para mí el amor puede ser suficiente, ¿por qué para él no? I am a stupid bitch.

Estoy brava porque estoy triste. A nadie le gusta él para mí. Pero si a mí me gusta él para mí, ¿quiénes son los demás para decir que no? Ellos sabían que me iba a hacer daño. Fino, yo no soy pitonisa, ni me gusta asumir cosas de la gente. Él técnicamente no me hizo daño. No fue que me montó cachos o me trató mal, es sólo que ahorita se está portando como un carajito. Ya.

Él no quiere arriesgarse. Yo quiero lanzarme con él sin paracaídas desde un puente 1000 metros sobre el nivel del mar  a una jaula de leones hambrientos. Desde el Salto Ángel sin casco me lanzo también si me lanzo con él. Pero él no. Él tiene baggage y no me quiere lo suficiente. ¿Qué hago yo llorando por un tipo que no quiere arriesgarse con una mujer como yo? Am I frigging insane? Have I learned nothing? ¿Por qué sigo insistiendo en querer hacer feliz a quien no está listo para ser feliz? A quien no quiere ser feliz, también. ¿Por qué, pajúa, de verdad? Qué vergüenza, Andreína. Pena te deberías dar.

Lo último me da arrechera también. Claro que me quiere lo suficiente. Lo que pasa es que es bruto y no entiende todo lo que podemos ganar. Lo que pasa es que es terco e insensible, orgulloso y arrogante. FUCK THIS.

Me da mucha rabia haber perdido, pero me da más rabia lo siguiente:
-Fulanito, por favor, perdóname. Perdóname e intentemos de nuevo.
- Nina, yo te perdoné.
- OK, vamos a echarle pichón pues.
- No, te perdoné porque no te odio por lo que hiciste, pero no como para volver.
- Entonces eso no es perdonarme.
- Claro que sí.

Eeeeemmm, ok. Nota para el mundo: eso no es perdonar. Si tú dices que quieres a alguien y dices que la perdonaste entonces la perdonas completo. No la perdonas por la mitad. La perdonas y sigues adelante. No es decir que perdonaste, es perdonar de verdad. Yo sí te perdono. Yo habré puesto una cagada desde la desesperación y el miedo a perderlo, pero él se equivocó también—casi tan grave como me equivoqué yo—y yo lo perdoné. Lo perdoné porque lo adoro como lo adoro. No digo que lo adoro y que lo perdoné, si no que lo perdoné tanto tanto así que para mí vale más el mes y medio glorioso que pasamos juntos que los 60 segundos de ataque de locura de esa noche infame.

Me da arrechera haber perdido el control. Tanta arrechera me da, que no me va a volver a pasar más nunca. Esta promesa es la única que nunca voy a romper. No quiero ser esa tipa a quien se le cruzan los cables y se vuelve loca. Quiero ser la tipa que está medio loca y eso es divertido. Loca bien, ojo. Ese segundo de desesperación no me volverá a pesar más nunca, porque más nunca me va a pasar.

Estoy brava conmigo y decepcionada de mí. No he aprendido nada. A los 25 años me enamoro como una huevona y se me olvida todo el camino recorrido: las expectativas son tu enemigo. No puedes esperar nada de nadie.

Me da arrechera que, para él, "querer" no signifique "poder" como para el resto de los mortales. Porque tuvo los santos testículos de decirme eso. Que él no podía. Quiere, pero no puede. Yo sé que quiere... pero no "puede". ¿Qué significa? ¿Qué? Fuck this. Fuck this mil veces, fuck this. 

Lo que más rabia me da es que lo quiero tanto todavía que no puedo decir lo que normalmente, conociéndome, diría: “¿que coño se cree ese gordito de mierdaaaaa?”. 

7 comentarios:

masterblink dijo...

Hola, por favor vuelve en tí, continua con tu vida, sé que no es facil, pero cuando te encuentres de nuevo contigo misma, te centres nuevamente en las metas que quieres alcanzar y quieras ser la mujer más increible de este mundo, entonces este sujeto se dará cuenta del mujeron que tiene por delante, quizas te busque o quizas no, pero sí lo hace tu seguramente lo habrás olvidado. Con estos últimos post muestras actitudes que hacen que huya cualquiera. Tú no eres así, al menos no lo creía, pero que importa lo que piense un simple lector?...solo lo digo por tu bien

Andrea dijo...

No hagas caso al comentario anterior: rockeas más cuando estás down.

No, mentira.
Chama, escucha a Adelita y cómete un alfajor de Havanna. Es autodestructivo y te lleva directo a la miseria jevistica pero -no sé por qué-, también la llena a una.

Anónimo dijo...

Me parece muy honorable y decente que quieras tanto y de ese modo: siéntete orgullosa de eso y escribe, eres una escritora. Saludos

Mariela dijo...

Los hombres son unos imbéciles que no se dan cuenta de lo que tienen al frente.. He dicho!

Coraline dijo...

No estoy de acuerdo con el comentario de masterblink y muy por el contrario creo q hay q estar demasiado seguro de uno mismo como para teenr el coraje y el valor de echar las tripas como las has echado tú con este post.

Yo creo q drenar lo q uno siente ayuda mucho, y más si hay una comunidad de lectores de este lado q te apoya.

No me gusta generalizar pero es q es un hecho q en general los hombres son demasiado básicos, demasiado imbéciles, demasiado tontos, demasiado individuales, demasiado incomplacibles o demasiadoas otras cosas q hacen q jodan lo bueno q tienen y q jodan a las buenas q están con él.

Tú eres un palo de mujer pero los malditos imbéciles q existen en este planeta, por mucho q nos hagan felices nunca nos valorarán lo suficiente como para quedarse con nosotras porque nuestra compañía por sí misma o todo nuestro talento o todo nuestro cariño no basta.

Yo también me pregunto ¿por qué?

Ani dijo...

No es que los hombres sean una cuerda de imbéciles que no se dan cuenta de lo que tienen en frente, es que nosotras mismas no nos damos nuestro valor frente a ellos!

Lau dijo...

Nina, te leo por Batita... Sólo te diré una vez más lo que todas nos hemos dicho en algún momento: Capitaliza y escribe.